El estrés antes de la boda

Estrés antes de la boda

Manejo del estrés previo al casamiento.


El período anterior a la boda puede ser un momento especialmente estresante. Controlar el estrés y la ansiedad con eficacia puede ser crucial para hacer este momento un hecho positivo para usted y su pareja. Usted quiere que el proceso de planificación de la boda pueda acercarlos y crear intimidad entre ustedes. El exceso de estrés puede interferir con este importante objetivo.

Una diferencia importante entre los que se sienten abrumados por el estrés y los que no, no es la presencia o ausencia de estrés, si no la capacidad de reconocer el estrés, cuando se produce, y manejarlo.

El manejo del estrés implica cuatro tareas:

  • Reconocer y comprender los signos del estrés.
  • Identificar y entender las fuentes del estrés.
  • Aprender a manejar las fuentes controlables de estrés.
  • Aprender a apoyarse a uno mismo y a enfrentar las reacciones de estrés que surgen frente a situaciones más allá de su control.

  • Signos de estrés


    Sobrereacciones de estrés incluyen una amplia gama de síntomas: dolores de estómago, dolores de cabeza, problemas para dormir, falta de concentración, mal humor, irritabilidad y pensamientos acelerados. Es importante reconocer que todos estos son signos de sobrecarga de estrés, y probablemente no de algo más serio.


    Fuentes de estrés


    Durante el período previo a la boda hay muchas decisiones estresantes, gastos, expectativas y nuevos roles. Muchas personas no se dan cuenta de cuán grande puede ser el impacto que este estrés puede tener sobre su felicidad y relaciones. Tal vez uno de los aspectos más difíciles del período anterior a la boda puede ser la diferencia entre la tensión inherente, por un lado, y las expectativas de que esto será un momento de felicidad y satisfacción, por el otro. El perfeccionismo sobre los arreglos de la boda es muy común y puede ser una gran fuente de estrés.

    Otras fuentes de estrés no desaparecen sólo porque se estén casando. Estos factores estresantes adicionales pueden agravar el estrés antes de la boda. Tenga en cuenta que todo cambio es estresante, incluyendo un cambio bueno. (¿Y acaso casarse no es un gran cambio bueno?) Otros factores comunes que pueden contribuir al estrés pueden incluir el trabajo, más compromiso, cambios de casa, viajes, enfermedades y la pérdida de un familiar, amigo o mascota. Para aquellos que se embarcan en un segundo matrimonio y las padres solterios, las demandas de educación de los hijos y las complicaciones financieras pueden ser factores de estrés.

    Algunas de estas fuentes de estrés son controlables. Por ejemplo, algunas actividades y compromisos son opcionales, como el hecho de que usted controla cuan perfecto espera que la boda sea. Otros factores estresantes están más allá de su control. Por ejemplo, nadie puede evitar pérdidas personales y enfermedades.


    Para hacer frente al exceso de estrés, primero debe reconocer y manejar aquellas fuentes de estrés que están bajo tu control.

    Tomando el control de los factores estresantes


    Si usted está experimentando síntomas de una sobrecarga de estrés, considere lo que usted puede hacer para reducir su carga de estrés:

  • Hable con su pareja y asegúrese de que los planes de la boda reflejan sus verdaderos deseos. Por supuesto, una gran boda es algo maravilloso, siempre y cuando realmente valga la pena el esfuerzo y el gasto que esto trae para usted. Sin embargo, algunas parejas lanzan elaborados planes de boda sin detenerse a pensar en si estos se basan en suposiciones no comprobadas sobre lo que cada pareja desea. (“Yo pensaba que querías una gran boda”. “Oh, pero si lo estaba haciendo por ti”.) Si una gran boda está en sus planes y su presupuesto lo permite, considere contratar a un coordinador o planificador de bodas para manejar muchos de los detalles.

  • Es posible que deba volver a examinar sus suposiciones acerca cuanto esperar que usted mismo pueda manejar. Puede ser difícil de admitir que no necesariamente se  puede hacer y lograr todo lo que nos gustaría en el tiempo que teníamos en mente o a disposición.

  • Es posible que se deba delegar algunas tareas o funciones. No sea tímido en preguntar a su pareja, amigos o parientes que le ayuden con algunas de ellas. A veces esto significa contratar ayuda adicional, para limpiar o cuidar a los niños, por ejemplo, incluso si eso significa un poco más de lo que había planeado. Deje que los proveedores de servicios de bodas lleven algo de la carga, después de todo tienen una gran experiencia en bodas. Sea selectivo con las tareas que realmente necesita supervisar personalmente.

  • Acepte que existen límites a su control sobre la boda. Cualquier evento que involucre tantas personas tendrá algunas imperfecciones. Lo que no salga exactamente de acuerdo al plan se convertirá en una bonita historia de la boda en los próximos años.

  • Utilizar estrategias de gestión del tiempo para priorizar y establecer límites.

  • Usted puede tener que hacer los arreglos necesarios para reducir su carga de trabajo o tomar algún tiempo fuera de este durante el período previo a la boda. Es posible que necesite tomar más tiempo fuera de lo planeado, pero posteriormente puede recuperar ese tiempo.

  • Muchas obligaciones sociales pueden ser aplazadas. A veces pareciera que todo el mundo quiere unirse y compartir la emoción de los meses previos a la boda. Esto puede ser divertido, pero a veces es demasiado. Sólo unas cuantas horas en el día. La gente comprenderá cuando usted les diga que está sobrecargado por la planificación de la boda.

  • Incluso después de haber hecho lo posible para controlar las fuentes de estrés, es probable que haya un montón de "incontrolables" fuentes de estrés que se mantengan. No tema, ya que hay muchas estrategias para ayudarlo a apoyarse a usted mismo y hacer frente a las reacciones de estrés.

    Ayúdese a usted mismo durante períodos de estrés


    Hay muchas cosas más que usted puede hacer para mejorar su capacidad para manejar y recuperarse del estrés.

  • Duerma lo suficiente.
  • Haga ejercicio todos los días.
  • Coma comidas normales, equilibradas y moderadas.
  • Evite el exceso de azúcar, cafeína, nicotina, alcohol, drogas, etc. Todo esto hace que su sistema colapse después del efecto estimulante o relajante.
  • Aprenda a hacer ejercicios de relajación o meditación.
  • Mantenga una perspectiva al respecto. Hable con otros sobre el estrés. (Todo el mundo tiene o ha tenido la estrés).
  • Tómese un tiempo para la diversión y otras actividades placenteras.
  • Tómese un tiempo para conectarse con su pareja y pasar tiempo juntos.

  • No se presione a si mismo para hacer demasiados cambios al mismo tiempo.