Estrés en adultos mayores: Síntomas y Manejo

Estrés en adultos mayores

Todos debemos enfrentar diferentes tipos de estrés mental en varias etapas de la vida. El estrés crónico y excesivo es dañino y puede causar problemas físicos o mentales.

No es tan difícil de manejar cuando somos jóvenes. Pero a medida que envejecemos, lidiar con el estrés ya no es tan fácil.

Tendemos a tener menos resistencia al estrés, y los adultos mayores a menudo descubren que el estrés los afecta de manera diferente ahora.

Por lo tanto, todos deberíamos entender más sobre el estrés y aprender estrategias de afrontamiento adecuadas para nuestro bienestar físico y mental.

Fuentes de estrés

Las fuentes comunes de estrés para personas mayores incluyen:

  • Cambios de estilo de vida y estado financiero después de la jubilación
  • Cuidado de nietos
  • El cuidado de un cónyuge enfermo
  • Muerte de familiares, amados o amigos cercanos
  • Deterioro de habilidades físicas y enfermedades crónicas
  • Preocupaciones por no poder vivir de forma independiente
  • Preocupaciones por la institucionalización


Signos y síntomas comunes del estrés

Fisiológicos

  • insomnio, pesadilla
  • pérdida de apetito, palpitaciones
  • micción frecuente
  • dolor muscular y cansancio

Psicológicos

  • ansiedad, miedo,
  • frustración, depresión
  • inquietud
  • falta de concentración
  • olvido

Cambios en la respuesta al estrés

¿Qué tiene de diferente lidiar con el estrés cuando somos mayores?

Nuestras células están envejeciendo. La capacidad cardíaca y la capacidad pulmonar disminuyen, especialmente si se es sedentario. Eso nos impide acomodar adecuadamente la respuesta de estrés natural del cuerpo.

También puede sentir una diferencia mental. Normalmente cuando estamos estresados, nuestros cerebros se inundan de hormonas del estrés, el cerebro se hace cargo, y la parte frontal del cerebro, que controla la concentración, la atención y la toma de decisiones, funciona menos bien.

Las hormonas del estrés en el cerebro también pueden contribuir a problemas de memoria a corto plazo que no están relacionados con la demencia o la pérdida de memoria relacionada con la edad. El sueño reparador ayuda a eliminar las hormonas del estrés del cerebro.

Sin embargo, muchos adultos mayores tienen problemas para dormir. El estrés puede hacer que sea más difícil conciliar el sueño. La incapacidad de eliminar estas hormonas del estrés del cerebro durante el sueño significa que los efectos cognitivos del estrés pueden empeorar con el tiempo.

Cambios en los factores estresantes

Cuando eras más joven, tus factores estresantes pudieron haber sido un día ocupado en la oficina o un niño llorando. Los factores de estrés que afectan a las personas mayores son la pérdida de un ser querido, demasiado tiempo no estructurado en sus manos, un cambio en las relaciones con otros o la pérdida de habilidades físicas, como visión, audición, equilibrio o movilidad.

Los síntomas de estrés pueden incluir dolores de cabeza por tensión, indigestión, palpitaciones del corazón, falta de concentración, dificultades para dormir, ansiedad, irritabilidad, llanto o comer en exceso. Si alguno de estos síntomas está interfiriendo con su calidad de vida, se sugiere buscar ayuda.

Qué deberías hacer

Si se siente estresado, se recomienda hablar sobre sus preocupaciones con sus seres queridos y someterse a un chequeo físico.

El estrés puede estar teniendo un impacto físico en usted que usted desconoce. El tratamiento puede incluir tratar una afección subyacente, como la presión arterial alta.

También es importante llevar una dieta saludable y hacer mucho ejercicio, así como alimentarse realizando actividades recreativas que le den alegría y hacer tiempo para socializar.

Una gran parte del control del estrés se centra en neutralizar la respuesta al estrés, con:

  • la respuesta de relajación, que ayuda a reducir la presión arterial
  • la frecuencia cardíaca
  • la frecuencia respiratoria,
  • el consumo de oxígeno
  • las hormonas del estrés


Las técnicas para obtener la respuesta incluyen yoga, tai chi, meditación, imágenes guiadas y ejercicios de respiración profunda.


Otro tratamiento para el estrés es la terapia cognitivo-conductual, que lo ayuda a identificar el pensamiento negativo y reemplazarlo con pensamientos saludables o positivos. Estas son excelentes habilidades, pero a menudo no funcionan de inmediato.

Por lo tanto, es posible que necesite pastillas, como antidepresivos u otros.

Manejo del estrés

Los ancianos pueden compartir sus dificultades y sentimientos al enfrentar el estrés y su manera de enfrentar situaciones, con aquellos a quienes pueden confiar (por ejemplo, parientes y amigos). Esto ayuda a ventilar las emociones y facilitar el aprendizaje de diferentes estrategias para sobrellevar el estrés.

Una vida social activa, un estilo de vida saludable y ejercicios de relajación son todas maneras útiles de manejar el estrés.

Participar en el trabajo voluntario es un medio para ayudar a los menos afortunados. También ayuda a aumentar la autoconfianza y ampliar la perspectiva de vida.

El pensamiento positivo, como la apreciación de los logros y las fortalezas, puede ayudar a aumentar la confianza en uno mismo y enfrentar el estrés.